Captura de CO₂

CAPTURA DE CO₂ DE EMISIONES INDUSTRIALES Y DE CENTRALES ELÉCTRICAS

Una de las principales fuentes de contaminación atmosférica son las emisiones de las centrales eléctricas industriales. Los gases de escape producidos no sólo afectan a la salud humana, sino que también causan daños ecológicos.

PSC se compromete a aportar su mejor experiencia y recursos en este reto mundial. 
PSC ya ha participado en varios proyectos relacionados con la captura y reducción de CO₂.

Los gases de efecto invernadero como el CO₂ contribuyen a aumentar la temperatura en el planeta Tierra, afectando al cambio climático, en forma de condiciones meteorológicas extremas como:

- sequías

- olas de calor

- lluvias torrenciales

- inundaciones y corrimientos de tierras

Con la consecuencia de la subida del nivel del mar, la acidificación de los océanos y cataclismos como: daños a las plantas, pérdida de biodiversidad, corrimientos de tierra, avalanchas, deshielo de los glaciares, agotamiento del agua dulce, aumento de la desertización.

La combustión de carbón, gas y petróleo y los residuos sólidos, así como la combustión natural de árboles y materiales biológicos, producen dióxido de carbono (CO₂) que entra en la atmósfera.

La captura de CO₂ se realiza de forma natural por absorción química de las plantas, alterativa al proceso natural de fotosíntesis.

La emisión anual de CO₂ procedente de los combustibles fósiles y la industria es de unos 36.000 millones de toneladas al año. En las últimas décadas se ha producido un importante aumento de la tendencia de las emisiones a partir de los años 90.

Casi todas las industrias producen formas de contaminación con diferentes repercusiones en el medio ambiente.

En la producción industrial de cemento y cal, la piedra caliza cribada se calcina a unos 900 °C (1.650 °F) en diferentes tipos de hornos de cal para producir cal viva según la reacción y dióxido de carbono (CO₂).

La emisión de CO₂, como subproducto indeseable, es la principal causa de los gases de efecto invernadero, que pueden contribuir al calentamiento global y al cambio climático.

Hoy en día, la Organización Mundial de la Salud y los Comités Internacionales se dedican a crear el conjunto de normas reguladoras para reducir la emisión de CO₂ y, al mismo tiempo, maximizar la captura de CO₂ del aire y atraparlo de diferentes maneras.